Conozca las cinco claves del poder mental

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“La mente puede ser maravillosa o un infierno, y que sea una cosa o la otra depende, en general, de nosotros mismos, que podemos ser nuestros mejores aliados”, señala el psicólogo Juan Carlos Álvarez Campillo, experto en liderazgo y orientador de grandes deportistas y de altos ejecutivos.

Álvarez es autor del libro ‘El entrenador mental’ y ha asesorado a destacados profesionales como el exseleccionador nacional de fútbol español Julen Lopetegui y a las campeonas olímpicas españolas Carolina Marín, en bádminton, y Ángela Pumariega, en vela.

“La mente se puede y debe entrenar y educar para que piense a nuestro favor. Cuando no somos conscientes de lo que pensamos, y lo hacemos de forma rutinaria y automática, muchos pensamientos son improductivos y negativos, lo que nos acaba desgastando y generando malestar y estrés”, explica Álvarez. 

“La mente tiende a lo negativo, y hay que reeducarla con el entrenamiento mental adecuado, al igual que se entrena el físico o una técnica en una profesión o deporte”, añade el experto. 

Los ejemplos de lo que este cambio de mentalidad puede ayudar a nivel de bienestar emocional y tranquilidad son muchos. Por citar algunos que brinda el experto: “Si en el trabajo tenemos una discusión con un compañero o con el jefe, una mente saludable sabe gestionar las emociones para no perder el control y decir las cosas de manera razonable y asertiva, sin elevar el tono de voz, sin decir palabras que puedan herir a la otra persona o de forma agresiva, simplemente argumentando las razones o expresando el malestar que produce una situación”, apunta.

También, añade, “si se produce un hecho que nos genera tristeza, como un despido, la pérdida de alguien querido o una ruptura en una relación amorosa, una mente en buena forma sacará aprendizajes de la situación, en vez de hundirse, y planeará los siguientes pasos para lograr un estado similar o mejor que el anterior; una vez pasado un breve periodo de tristeza, que es lógico”, señala. “Y lo anterior es solo una parte de lo que podemos conseguir con el entrenamiento mental”, señala Álvarez Campillo. A continuación, las cinco claves para una mente saludable y en forma, y cómo aplicarlas en la vida diaria.

1. Sea consciente de lo que está pensando
Lo primero y más básico es ser conscientes de aquello que está pasando por nuestra mente. Y conviene, señala este psicólogo, “hacerlo varias veces al día: parar diez segundos y preguntarse: ¿qué estoy pensando ahora mismo? ¿Por qué?”.

“Si, por ejemplo, tenemos una mala relación con una persona, en el trabajo o en el ámbito personal, lo primero que podemos hacer es detenernos un momento y pensar qué es lo que está pasando por nuestra mente relacionado con esa persona, qué pensamientos nos produce. Ser consciente de ello es muy importante”, explica.

2. Analice el signo de sus pensamientos
“Una vez identificados los pensamientos, hay que ver si son positivos o negativos, si nos ayudan o perjudican, y qué emoción nos producen: enfado, alegría, ansiedad u otras”, según Álvarez Campillo. Esto es clave, afirma, para que vayamos tomando el mando de la situación”.

3. Aléjese del ‘lado oscuro’
“Si nuestros pensamientos son positivos, debemos atesorarlos, potenciarlos. Si no es así, tenemos que recordar la emoción desagradable que nos producen y, el siguiente paso, deberá consistir en tomar distancia diciendo: ‘esa persona no soy yo, es solo un estado de ánimo pasajero que tengo’”, señala el psicólogo.

Es lógico que tener una mala relación con una persona nos genere emociones que no nos gustan, como la rabia o la ira, pero “somos mucho más que esas emociones temporales y pasajeras, hay muchas otras cosas en nuestra vida que nos hacen sentir bien y tenemos que poner el foco en ellas”, añade. “Ocultar las emociones no es saludable, hay que saber gestionarlas siempre”, enfatiza el especialista.

4. Privilegie lo positivo
El siguiente paso es sustituir los pensamientos improductivos y negativos por otros que nos produzcan buenas sensaciones y, con ello, que también mejoren nuestras emociones. “Podemos conseguirlo haciendo algo que nos guste, conversando con alguien que nos haga sentir bien, disfrutando de las buenas sensaciones, como puede ser tomando una comida rica, dando un paseo, viendo una película o acudiendo a un evento que nos apetezca”, apunta. 

Álvarez asegura que, una vez que se es consciente de que somos mucho más que nuestras emociones negativas pasajeras y momentáneas, podemos decidir pensar en otras cosas que nos cambien el estado de ánimo y nos hagan sentir mejor. Asimismo, “podemos recordar nuestros valores y logros, aunque sean pequeñas cosas, ya que eso hace que sintamos emociones más placenteras y agradables”. 

El experto recalca que “pensar que podemos estar mejor y hacer cosas en ese sentido, sin rendirnos nunca, hace que podamos lograr siempre más de lo que pensábamos. ¡Confiar es clave!”.

5. Ejercite su mente para fortalecerla
“Seremos dueños de nuestros pensamientos la mayor parte del tiempo, de una mente en forma y, por tanto, de nuestro destino, si practicamos esto y lo reforzamos con ejercicios de relajación, atención y concentración, que después nos ayuden a pensar y a sentir con más facilidad lo que deseamos”, sugiere este autor. 

Basta con parar, mínimo dos o tres veces a la semana, para concentrarse en la respiración durante 5 o 10 minutos, sintiendo las distintas partes de nuestro cuerpo, así como su postura y sus tensiones, “sin aferrarse a los pensamientos que vengan o imaginándose en un lugar que nos haga sentir bien”, recomienda. “Con la práctica, uno se va desprendiendo de la turbulencia mental diaria, que produce interferencias y limitaciones, para dar lo mejor que se tiene en todos los niveles de su existencia”, concluye el psicólogo.


Fuente: El Tiempo